2.4.08

Cristina Clinton de Kirchner (alias: Evita)



Es cierto que hay personas que por características físicas o por similitudes de personalidad, carácter, etc se pueden parecer o hacernos recordar a otra.
En el caso de Cristina Fernández de Kirchner pareciera que le andan buscando un modelo al que compararla, pero sin mucho éxito, según creo.
Durante la campaña electoral que terminó con su elección como presidenta de la Argentina, la compararon con Hilary Clinton, la mujer de Bill (sigue siéndolo a pesar de la Lewinsky y el toscano). Creo que la pifiaron feo. Sólo se parecen en tres cosas: las dos están casadas con ex presidentes, son abogadas y son mujeres. Al menos hasta el momento no se conoce ninguna historia de Néstor con una becaria. Además, creo que no fuma…
También (y cada vez más insistentemente) se la compara o se le encuentran similitudes con Eva Duarte de Perón (Evita). No la conocí, desde luego, pero por lo que sé de ella y las fotos y filmaciones que conozco, no me parece que tenga nada que ver con la “abanderada del peronismo”. Por otro lado, jamás podrían tener un alto grado de semejanzas dos dirigentes políticos que se desenvolvieron en escenarios políticos y sociales tan diferentes.
Ni siquiera Cristina tiene la voz tan chillona como Evita. Tal vez quieran resaltar la postura algo así como altanera o soberbia. Podría ser. Aunque no sé cuántas mujeres podrían dejar de tener esa postura para dar la imágen de ser fuertes ante la mirada de los hombres, pero principalmente de sus congéneres, las mujeres. Es más, últimamente Cristina insiste en decir en sus discursos que las cosas le cuestan y le van a costar más por ser mujer. Táctica doble: por un lado está dirigida a las mujeres para ganarse su solidaridad. Por el otro, intenta dejar instaurado que si alguien la ataca es por su condición femenina solamente (no sé si será por eso o no, lo cierto es que hay cierto tufillo a tratar de minar o a desgastar su imagen). Además hasta el momento la oposición (o el patético rejunte de políticos mediocres que hay del otro lado del peronismo) no acertó con ningún argumento político de peso y medianamente inteligente como para oponerse a los Kirchner.

Pero lo que estoy viendo es que se está intentando socavar la autoridad de Cristina... Y hayamos votado por ella o no, esto es algo que ya no podemos admitir.
Lo del campo de éstas últimas 3 semanas me parece ya una locura. Locura en la que, lamentablemente, se dejaron meter los pequeños y medianos productores, que le sirven de mano de obra piquetera a los terratenientes de la oligarquía agro-ganadera, la misma que dirige el país desde antes de que se llamara Argentina. Los que casi eliminaron a los indios para marginarlos y saquear sus tierras, que hoy disfrutan y usufructan sus descendientes. Nunca la Argentina consiguió despegar demasiado en el tema de la industria debido a que siempre se quiso hacer del país un mero productor de materia prima. El objetivo de la oligarquía siempre fue superponer sus intereses a los de la mayoría… y además, en pos de sus intereses económicos y de clase, siempre servil con las potencias que dominaran la escena mundial en las diferentes épocas de nuestra historia.
Pero bueno, ya me estoy yendo para otra parte.
Habrá que ver qué otro modelo de mujer encuentran por ahí que les sirva a estos señores para tratar de ridiculizar o demonizar a quien no les gusta o no representa cabalmente sus intereses.
Por mi parte, no me importa a quién se parece o no. Lo único que me importa es que si existen presiones, sean para que el gobierno defina un plan de, justamente, gobierno. Que tenga un rumbo definido y que pueda terminar su mandato sin que tengamos que mirar para los cuatro costados a ver de qué lado nos va a venir el mazazo: golpe económico o golpe de Estado.

"Una pulga no puede picar a una locomotora, pero puede llenar de ronchas al maquinista" (Libertad, amiga de Mafalda)